viernes, 8 de agosto de 2014

Saga

      Es como si cada vez que ella se acordase, algo dentro se revolviera clamando por liberarse y desprenderse de mis labios. Un llamamiento funesto a una mente anestesiada a la fuerza y no por propia voluntad.

Pero ahora, lo sabía.

        A pesar de todo y aunque las circunstancias hubiesen sido diferentes, todo hubiera sucedido igual.

Porque ella le estaba reservada, pero solo para un único cometido.

          Y, a pesar de tratarse de una chiquilla, lo consiguió en ciertos momentos. Y dependiendo de los gustos, como siempre.


 No quedaba rastro
de nada
no quedaban reductos de lo que fue.

Y seguía, trazando caminos
curvas imposibles
e inventando incluso fastiches
que la llevaran hasta el mismo lugar

Del que nunca podía escapar
pero el cual, sin motivos,
no podía encontrar por su propio pie.

Mentía fingiendo pequeños detalles
frases que le diesen las señales
para seguir soñando con ella
y creyendo que, alguna vez, hubiese podido ser
su Greta.

 No quedan finales, solo olvido
que se corrompe cada vez que pronuncia su nombre
cada vez que cree que ella recuerda.
Cada vez que se engaña creyendo que ella recuerda.

martes, 5 de agosto de 2014

Dama.

La dama, desciende.


Se intercalan
frases y versos
frag-mentos.

Se escribieron con miedo
grabados con fuego
de terrores del alma.

Y cada noche se desataban
de las cuerdas del decoro
de las fantasías de locos
dejándose ir por la madrugada.

Pero ya no, no volvieron
a echar cuentas ante el invierno
ante el frío del espejo
ante la sonrisa de su recuerdo.


No duró su estela, su rastro
se esfumó entre la marañas de su pelo al viento
y de risas quebradas por el propio sujeto.