No cesar de correr
entre todas las paredes
que atrapan la piel.
No poder ni detenerse
acariciando una y otra vez
la posibilidad de sus intereses.
Y lo rompe, lo destruye,
lo reconstruye con sus pesadillas
y lo desdibuja sin más salida
que intentar ser indiferente.
Llevarlo hasta el fondo de lo real
a pesar de no tener más esperanza
que encontrar la última marca
que la conduzca hasta el final.
Siempre dice "más, quiero más"
¿Quién le hará entender que no hay nada?
¿Quién le hará entrar de una puta vez que no?
No, no, no, no, no, no, ¡Déjalo!
No hay comentarios:
Publicar un comentario