jueves, 22 de septiembre de 2011

Esto no es el fin del mundo, pero desde aquí se puede ver...


Nosotros somos el pájaro
y el huevo es el mundo,
para nacer hay que destruir el mundo.



Las cosas son tan complejas como las queramos ver, una situación puede volverse de normal a absurda en segundos o viceversa, ya que, las situaciones absurdas acaban por tener su propia lógica. Nada que ver con el tema que voy a tratar, o tal vez sí, pero de momento me interesa la famosa frase que he escrito en algunas entradas de "Eres el resultado de tantas decepciones"

La frase en cuestión me da que pensar, que para llegar a ser algo, debemos de equivocarnos tantas veces como podamos (o necesitemos) para llegar a ser lo que queremos, ya que, equivocándose se aprende ¿No? Además la destrucción de algo siempre implica el nacimiento de algo nuevo (materia ni se crea ni se destruye, solo cambia) que puede ser igual o diferente, ya dependiendo de la situación, el lugar, etc. Por lo tanto, siempre debemos de "destruir" algo, parte de nosotros, una árbol, un sentimiento o cualquier cosa, para dejar paso a una nueva, normalmente más útil y mejor. (excepto en el campo de los sentimientos, pero luego hablaremos de ello).

¿Significa esto que la raza humana ha llegado a un punto en el que debe destruirse para dejar paso a nuevas especies que evolucionen de la misma forma que lo hicimos nosotros? Claro está, según nuestras queridas religiones llegaremos a conocer la verdad una vez hayamos fallecido y si hemos sido buenos (aunque los 7 pecados capitales son las necesidades básicas de todo animal o vegetal, pero ese es otro tema) podremos sentarnos al lado de ese ser supremo que habita en los "cielos" y estar en gloria eterna junto a él. Si dejamos la fantasía a un lado y pensamos que esto es una metáfora (aquí viene mi gran rayada, no prometo que os guste xD) tal vez ese estar en gloria significa el resultado de cambiar a algo mejor, mejorar, evolucionar y esas cosas, cambiar, modificarnos. Estamos compuestos por millones de átomos! estoy segura de que tengo alguno que perteneció a una rata o a una hiena, o incluso a Voltaire o Juana de arco, y según los últimos estudios los planetas son como seres vivos a gran escala (comparándolos con vegetales para entendernos) nacen, viven, pueden reproducirse (choque de meteorito gigante contra un planeta enorme igual a 2 planetas o a un planeta y un satelito o algo así) y luego mueren; dejando tras de sí una gran massa de polvo y restos que después de algunos "añitos" se juntan de nuevo y forman un nuevo planeta o estrella.

¿Quiero decir con esto que tenemos que morir y destruirnos reiteradas veces para alcanzar la forma suprema que son las estrellas o los planetas? Pues no tengo ni la mínima idea chicos/as, pero comparto la filosofía de que destruyendo, o mejor dicho, cambiando cosas, el resto de cosas debe cambiar en conseqüencia sin ninguna excusa. Así pues os dejo a vosotros pensar en esto (sé que esto es una rayada enorme pero bueno xD) yo me retiro a tomarme algo contra los desvarios. Hasta otra!

3 comentarios:

  1. Eso es dialéctica pura. Todo nace de la contradicción.
    De totes formes no crec que la solució siga destruir-se. Per a què? Una vegada la dinyem no hi ha res(lo siento por negar la existencia del alma y pajas varias) així que no pense sacrificar-me per una hipotètica forma de vida superior…
    No sé, crec que en la nostra ma sols està "destruir" als demés…total..xD

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  2. Tingues en conter que es soles un desvario, rallà o com te done la gana dir-li XD (no, no havia vist el comentari fins ara, ho senc xD)

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