sábado, 30 de julio de 2011

Volverás...

De nuevo te apareces,
frente a frente, dejándome verte,
pidiéndome que te haga gritar
cómo si fuese lo más normal

Y mientras en el día a día,
como monstruo en ti
tu mirada es fría,
me deja sin saber que decir...

Retuerces verdades
y haces pedazos mis pensares
muriendo a tus pies
solo haces que pisotearme.

Vuelve a suceder
mi corazón desbocado
al sentir tu voz al lado.

Vuelve a ocurrir,
sin poder darle fin,
ahora sé, que volverás a gritar para mí...

O,O



Ey no me seas llorón
menuda combinación
de bombón y pecadora
esa boca quien la debe censurar
mamá, papá,
era para la policia local
tal vez la guardia real.


Aunque me joda, me encantan... XD

viernes, 29 de julio de 2011

Lo que se esperaba

Inmensidad Han pasado la última calle antes de salir de la ciudad para coger la carretera comarcal hacia uno de los pocos reductos de naturaleza que quedaban por la zona. Ella estaba sentada en el asiento de copiloto mirando a través del cristal el paisaje gris lleno de chalets y campos artificiales acompañados de un nublado cielo. Daba la sensación de estar en una película antigua en blanco y negro, la moda de pintar las paredes de cualquier casa de esos colores influía bastante. Pensaba en el mundo, en como la sociedad había evolucionado hasta ese punto, los niños eran educados de forma que fueran sistemas autómatas para el estudio y la educación cívica; métodos de enseñanza subliminal dominaban los televisores, motivo por el que muchos ni siquiera poseían una en sus casas; el medio ambiente era limpiado con depuradoras de aire que reciclaban el exceso de gases nocivos y los transformaba en oxígeno o hidrógeno. El resto de acompañantes en el coche charlaban sobre la última actuación de los radicales en el congreso y del modo en que la música se había vuelto asentada y tranquila, ya que hacía poco se habían prohibido músicas de "pitos" o que alteraran el organismo con cualquier tipo de ruido, el conductor solo prestaba atención a la carretera estrecha y mal cuidada donde habían baches a 200 metros.

Llegaron a la montaña que se alzaba sobre un valle con un color verde muy poco apropiado para el día que se había levantado. Salieron del vehículo y sacaron las mantas de picnic y las neveras con la comida planeada para el día. Sacaron las cervezas y conversaron sobre sus respectivos trabajos, tenían anécdotas simples con las que la mayoría reían por complacer. Ella sonreía y asentía sin prestar atención a lo que decían, seguía pensando cada vez más dentro de si misma, absorta en sus voces interiores y en las discusiones que formaban. Nadie se extrañaba de que actuara de esa forma distante, y nadie le preguntaba realmente en que pensaba.

Tenía los dedos fríos de sostener la lata y su corazón también a causa de la carencia de emociones o sentimientos. No recordaba que se sentía al beber demasiado, al subirse a una montaña rusa, a poner sus auriculares al máximo volumen, al reír de una manera descontrolada, ni siquiera de enamorarse. No se acordaba de como era que el corazón acelerase a causa de ver a la persona querida, ni de que su piel se erizara con el contacto de su pareja, ni de tartamudear cuando los nervios la traicionaban delante de su amor secreto. Nada, no encontraba nada en sus memorias, estaba tan vacía de recuerdos como aquella explanada de árboles.

Uno de sus amigos le lanzó su taper y para sorpresa de todos lo cogió con una mano sin demasiado entusiasmo. Abrió la tapa y empezó a comer los pequeños pedazos ya cortados de carne que contenía el recipiente. Totalmente insípida, totalmente inholora, los alimentos no tenían sabor ni olor a causa de ser artificiales, solo los salvaba el envoltorio que recubría las vitaminas, proteinas, minerales y demás que los envolvía para darle un aspecto más "natural". A sus compañeros no parecía importarles mucho, en cambio a ella la asqueaba sobre manera. Tan mecanizado, tan artificial, la vida se había vuelto exenta de cualquier irregularidad o desperfecto, todo estaba sumamente calculado y milimetrado para que no hubiese quejas de ningún tipo. Seguía comiendo con la cara larga y los ojos absortos en la inmensidad del paisaje, aunque con un poco más de rapidez para terminar pronto con aquella basura.

A veces la divertía el comportamiento de todos tan robotizado, eran máquinas orgánicas entrenadas sin darse cuenta para cumplir una función. Sí, tenían pensamiento crítico y seguían protestando delante de las leyes o propuestas que no les parecían buenas, pero incluso eso daba la impresión de estar calculado por convinenza de los manda más de la comunidad. Bebió un trago más de cerveza, sin alcohol por supuesto, y recordó las largas discusiones para intentar hacer entrar en razón a los demás, sin demasiado éxito, ya que sus argumentos se basaban en que no faltaba de nada. Era cierto, nadie pasaba hambre, nadie pasaba penurias económicas, todos tenían trabajo o estudiaban, todos se podían permitir algún caprichito o vacaciones de vez en cuando, ¿Qué más se podía desear? La gente creía que nada, ella creía que faltaba todo.

Los niños no caían al suelo y se hacían rasguños ni caían enfermos ni se comían los mocos, los adolescentes salían de fiesta y nunca llegaban tarde a casa ni descuidaban sus estudios, los adultos trabajaban duramente hasta la edad de jubilación sin quejarse ni provocar revueltas graves, los ancianos eran cuidados por el estado cuando no se valían por si mismos y a su muerte los cuerpos eran usados para los trasplantes de órganos o piel. Las relaciones sociales eran absurdas y se basaban tan solo en compatibilidad de gustos, tanto en amistades como en amorosas. No había nadie que quisiera el mal para los demás y todos parecían actuar bajo un estricto código moral de sonrisas y amabilidad disfrazando los pocos sentimientos y personalidades que aun quedaban en cada persona. Una utopía de ensueño, una gran fábula de cuento para niños que creían los adultos para no pegarse un tiro, porque aun quedaba gente que recordaba como era el mundo en las décadas anteriores, tan desgarrado y torturado como bello y agradecido. La vida, si se le podía llamar así, no era más que un espejismo de lo que era antes.

Allí, en aquel maldito paraje verde perfectamente cuidado sin ni un maldito mosquito que molestara la tertulia o saltamontes que asustara a los más cobardicas, ella bebía sorbo por sorbo mientras sonreía sin prestar atención a lo que se decía asintiendo con la cabeza y riendo las gracias de sus amigos.

Era simplemente, lo que se esperaba.

PD: A referencia del taller literario, gracias de nuevo ^^

Los días raros...



Caminabas perdida
en calles sin vida,
en la noche dejabas de respirar
para gritar sin preocuparte por el ruido.

Tenías entre las manos
el aguijón sin veneno,
sin tenerlo a tu lado
no podías ni reír.

Había demasiados brillos
que retumbaban en tus sueños,
caminando despacio cerraste tus oídos
para no escuchar el maldito eco.

Las paredes retumbaban con los deseos
y se derrumbaban delante de tus metas,
asfixiaban con ansiedad y nervios
provocando pequeñas heridas.

Se escapaba por la ventana
y tú sola barada
en medio de este oceano...

Se volvía a mirarte
y siquiera te rebajabas
a tan solo mirarle...

Por que son los días raros
los que pasan sin darnos cuenta,
cuando nada tiene ningún sentido
y no somos nosotros mismos...

miércoles, 27 de julio de 2011

Taller de literatura (Perros, haced algo XD)

-El relato debe tener, al menos, 3 pàginas

-Nada abstraco, intentar que sea una història sin muchas metáforas y tal y además el tema debe hacer referencia a una preocupación sobre el futuro del autor (cualquier tema es válido mientras sea propio)http://www.blogger.com/img/blank.gif

-Inspirado en una canción (no necesariamente debe tratar del tema de la canción que escojais)

-Publicar en los blogs antes del sábado.

Y por último, link a mi compañero promotor.

PD: Sí, me has animado y mucho =D

lunes, 25 de julio de 2011

Belle... La palabra se inventó para su piel...


Tendría en mis manos el mundo entero
pero solo pensaría en el lamento
de soñar a escondidas cual criminal
la carne del ave que jamás pude probar.

En sus ojos la oscuridad es clara
pero los días se vuelven confusos,
mientras su cabello el vuelo levanta
y baila a la luz de mis deseos oscuros.

No sirve de nada intentar escapar,
el embrujo que cubre su tez
mientras sigas vivo a cualquier lugar
te persigue nublando tu ver.

Las curvas a la perdición
son su dominio más cruel,
aceleran el corazón
y encienden hasta la más cruda piel.

Condenado quien la ve,
sacada de los mismísimos avernos,
no sirve de nada llorar,
porque no hay remedio para esta enfermedad.

Oh flor de lis, yo no soy hombre de fe, y tomaré la flor de amor de Esmeralda...

For you :3

Era una niña muy mona, no tendría menos de un año que ella, sus cejas se arqueaban cada vez que la veía pasar con una ropa tan mezclada. No sabía sí era pija, hippie, macarra, heavy o todas las cosas a la vez, una chica realmente extraña en verdad.

Las coincidencias las hicieron coincidir en los ensayos de coro, ella como veterana, y aquella chica como novata ilusionada que aun no sabía en que fregao se había metido, porque ciertamente, era algo duro y que requería constancia y sacrificio. Hablaba cada una por su lado, sin casi cruzar miradas, hasta que Andrea, la mayor, nombró un grupo bastante desconocido para la música comercial pero de una manera sorprendente Savannha, la menor, prestó atención a la conversación y comentó como si nada que también le gustaba el mismo grupo, diciendo que también le encantaría ir al concierto que realizaban dentro de 2 semanas.

Una relación bastante adorable la que empezó para que negarlo, y Savannha, aun lo era más, en una apariencia, porque demostró en menos de 2 días que de inocente e ignorante no tenía ni un pelo, realmente incluso era menos ignorante que Andrea. Salidas, secuestros varios y demás consiguieron forjar lentamente una amistad bastante fuerte y que parecía que se cultivaba día a día...


Es que eres monísima *o*

(T'ho he dit, no estic molt inspirà i escric fatal, però de totes formes açò va dedicat a tú carinyet, gràcies :3)

domingo, 24 de julio de 2011

Noches...

    Se revolvía en la cama de un lado a otro sin poder conciliar el sueño que tanto le hacía falta. No piensa realmente en nada. En nada excepto en ella, cual recuerdo la dañaba como si se tratase de la peor de las torturas. Un recuerdo que la hacía ponerse en tensión con tan solo mostrarse en un apartado rincón de su subconsciente. Un recuerdo que la estremecía y erizaba toda su piel. Pensaba ésto sudada, cansada y mojada; soñando despierta y fantaseando con su imaginación que jugaba con sus deseos más profundos repitiendo una y otra vez el mismo nombre.
    ¿Cómo demonios lo había permitido? ¿Cómo se había enamorado de alguien que ni siquiera se percataba de su existencia? No sabía qué responder a esta simple pregunta que era el principio de una cadena de muchas otras. La manera de comportarse de ella era realmente desesperante, y hacía que su mente se ahogara en un mar de dudas que no tenían ninguna solución por el momento. Sus puños se cerraban de rabía al recordar situaciones en las que saltaban todos los interrogantes y se maldecía por volver a pensarlo, pues cuando más lo pensaba más preguntas nacían de las entrañas de su pensar.
    Dio media vuelta y acarició la pared vacía de color en la sombra de la noche, todas las respuestas estaban como esa pared, faltas de luz que las esclarezca y las confirme. Ahogaba las lágrimas antes de que cayeran cuesta abajo por sus mejillas. Era tremendamente absurda la situación y ni ella misma la podía creer, encerrada en su propio mundo sin poder obtener ni una maldita claridad. Estaba claro, había sido tan imbécil de dejarse embriagar por alguien inalcanzable y ahora no había realmente vuelta atrás, solo la misma solución de siempre, dejar pasar el tiempo hasta que fuese capaz de hacer algo tan simple como olvidar.

viernes, 22 de julio de 2011

Malditas sean las noches...

"Maldigo los segundos
maldigo las horas
maldigo los días
maldigo los años.

Maldiciendo todo lo que veo,
corro y vuelvo a empezar desde cero
olvidándote a cada segundo."


Detengo las horas
esclavizada a las memorias,
atada con cadenas oxidadas
manchadas con mi sangre y a fuego forjadas.

Vi arrastrarse de nuevo,
al borde de la desesperación
a los sentimientos asfixiados.

En las manos la tinta
y en el corazón las heridas
sangrando emociones desesperantes
esperando por que llegue ella.

Puntual y sin retraso llega
oscura como siempre,
hoy parece que se acerca
susurrando en mi mente
los gritos de anteriores épocas.

Fría es su brisa
y mis manos congeladas
casi no albergan vida
espero que hoy, mi dulce carcelera,
seas benevolente y permitas que el sueño entre por tus rejas.


Your promises
They look like lies
Your honesty’s
Like a back that hides a knife...

tell me, what you kill...

Advertencia: Este escrito se podría considerar para mayores de 18 años (irónico en fin XD) pongo este aviso por si las moscas XD.



Como si perdiese el control...

     La bebida parecía haber hecho mella en su cuerpo ya que no sentía el frío que llenaba la noche. Ella estaba en manga corta sentada en la terraza de su casa recordando y olvidando lo que le interesaba. Aún quedaba un poco de esperanzas e ilusiones en su vaso. Bebió de un solo trago el contenido y lo estrelló contra el suelo, pues había comprobado con bastantes sobras que el alcohol no es más que un agravamente para la enfermedad emocional y ahora pagaba las conseqüencias que se mostraba en sus lágrimas. Un suave susurro invadió sus tímpanos provocando un escalofrío en su piel. Esa maldita voz, tan jodidamente atrayente como seductora, la hacía morderse los labios cada vez que la escuchaba o la recordaba. Sintió su respiración en su cuello, como bajaba lentamente erizando cada centímetro que atravesaba, tan asombrosa, tan rítmica, tan tranquila...
     Su cuerpo excitado notó el tacto de sus manos paseando por su espalda lentamente, subiendo su camisa y acariciando ahora la piel desnuda mientras desabrochaba su sujetador permitiéndole acariciar sus pechos indefensos. Su boca seguía repasando su cuello mientras le susurraba palabras inaudibles pero gratamente excitables. Los nervios empezaban a traicionarla y estaba impacientándose con tanto jugueteo. Era la mejor de las torturas, pero aun así una tortura. Suplicó en voz baja que no se demorara más y su acompañante obedeció descendienco lentamente hasta el centro de su humedad. Podía sentirlo claramente. Podía notar las suaves embestidas que sus dedos habían empezado. Podía notar su respiración cada vez más difícil de mantener. Podía sentirla a ella por entero. Podía sentir como todo su cuerpo se rendía ante ese acto tan vulgar como fascinante y empezaba a contraerse a causa del climax.
   Con las gotas de sudor en el rostro y aun con la respiración alterada intentó dejarse caer para descansar y notar por entero el cuerpo de su amante. Pero no había nada y el golpe en la cabeza la hizo salir de aquella alucinación tan extraña. Tocó el lugar donde le dolía la cabeza y luego el lugar donde su corazón estaba latiendo con la fuerza de un huracán. Suspiró resignada mientras se prometía a si misma no volver a beber de aquella forma, otra voz en su cabeza no dejaba de rondarla repitiendo lo mismo una y otra vez:


¿Dónde estás?

Seis meses...

    Las camisas bien dobladas dentro de la maleta, las llaves en la mesita de noche y una nota de despedida en la mesa del comedor. Las lágrimas en los ojos y la esperanza en el corazón de que no sufran más de la cuenta. Son solo seis meses lo que queda, seis duros meses en los que poco a poco se irá haciendo una carga más y más pesada para sus familiares. Prefiere marcharse, prefiere desaparecer y que la odien antes que compartan el dolor de su enfermedad. Nadie sabía nada, nadie sabía a donde iba, ni siquiera ella misma caminando entre la fría brisa de esa noche de verano lo sabía.
     No había ni un alma en las calles de aquella maldita ciudad. Subió a su moto de gran cilindrada asegurándose de que llevaba la cartera con parte de sus ahorros, la otra parte los había dejado al lado de la nota. La suerte de haber estado trabajando los últimos 3 años pudiendo ahorrar prácticamente todo lo que ganaba ahora le aseguraba que al menos no pasaría hambre. Pensó que carretera tomar, aunque poco importaba, fuese a donde fuese, su destino sería el mismo. Intentaría encontrar trabajo mientras le quedasen fuerzas y aparentar relativa normalidad allá dónde fuese. Arrancó el motor y aceleró a la máxima velocidad que pudo.
     En casa mientras sus padres aún dormían, tranquilos y seguros de que su hija hubiese superado el reconocimiento médico con buena salud. Una hija realmente brillante en los estudios y trabajadora, algo testaruda y cabezota, pero una buena hija. El padre abrió los ojos después de escuchar algo parecido a la puerta de la calle cerrarse. Seguramente no sería nada pero se levantó para comprobar que todos estaban bien. Salió de la habitación y miró en la habitación de su hijo pequeño, dormía plácidamente y no parecía haber nada raro allí, miró en la habitación de su hija mayor todo parecía normal, aunque algo extraño había en su postura de dormir.
     Se acercó para darle un beso y con un fuerte shock descubrió que era la almohada lo que hacía de hija. Rápidamente comprobó todas las habitaciones de la casa sin encontrarla, despertó a su madre quién asustada fue a comprobar de nuevo la habitación de su hija viendo para su asombro que no estaba ni siquiera la ropa. Su padre salió corriendo a la calle llamándola a gritos. Ninguna respuesta, solamente las luces de algunos cuartos de los vecinos se encendieron extrañados de el escándalo que se estaba formando. Cuando subió de nuevo a casa, reparó en que no estaba la moto que le regalaron al cumplir los dieciocho años. La voz de su mujer llamándolo le hizo subir las escaleras de 3 en 3. Había encontrado la nota y el sobre con el dinero de sus ahorros.



"Siento marcharme de esta forma tan repentina, pero me siento asfixiada y necesito encontrarme a mi misma, decidle al pequeño Mike que lo siento. Os quiero mucho.

Laura."

Only you...

Te tendría entre mis manos
y te escaparías,
te tendría entre mis brazos
y te esconderías.

Te arroparía con besos
y te asustarías,
te daría consuelo
y seguirías fría.

Permanecería quieta
y te seguiría buscando
durante todas las noches.

Estarías callada
y seguirías sin escuchar
como te llamo en la oscuridad
a gritos desesperada.

miércoles, 20 de julio de 2011

Es la ley innata...



Sudando queroseno,
enciendo la llama
y ella me quema
de dentro hacia fuera.

La noche acabada,
el Sol creciendo,
y ardiendo de calor.


El amanecer eterno
se ha vuelto desesperante,
me mata con sus buenas maneras.

El cielo a color
tintado de gris,
los nervios tranquilos
y la tormenta encima de mí.

"Miente, si dice no te miente,
si dice sí te miente
y si calla también miente."

lunes, 18 de julio de 2011

Moskau!!!!

Vale, como no tengo ni idea de reducir la entrada para que pincheis si quereis verla, pido disculpas porque será algo larga, ahí va!


Empezamos con MCR...

I never told you what I do for a living:


I tried,
One more night
One more night
We will
Laugh out
Cry out
Laugh out loud


You know...


To your room...
What they ask of you
Will make you want to say, "So long..."
Well, I don't remember,
Why remember...YOU?!


Vampires will never hurt you


And if they get me take this spike and
You put the spike in my heart


Planetary Go!


Ladies and gentelman truth
is now aceptable
fame is now injectable
process the progress!



Ahora varias =D
The kill...


I tried to be someone else
But nothing seemed to change
I know now, this is who I really am inside.
Finally found myself
Fighting for a chance.
I know now, this is who I really am.


Emergency...


The hell song...

Why do things that matter the most
Never end up being our choice
Now that I find no way so bad
I don't think I knew what I had.


Cry for the moon...

La voz... esa jodida voz es genial...

Needles...

I'm, sitting in my room
with a needle in my hand
is waiting for the tomb...


The path to decay...


Amaranth


A fuego!

¿Dónde están los besos que te debo?
en una cajita
que nunca llevo el corazón encima
por si me lo quitan,
¿Dónde están los besos que me debes?
en cualquier esquina
cansados de vivir en tu boquita
siempre a la deriva...


The hunger...

Don't go!!

Y para la despedida...


Oh, motherfucker
If life ain't just a joke
Then why are we laughing?
If life ain't just a joke
Then why are we laughing?
If life ain't just a joke
Then why are we laughing?
If life ain't just a joke
Then why am I dead?

DEAD!

Mi top 10 de canciones Disney/Dreamworks

(Me he puesto nostálgica, sí XD)

Las plagas - El príncipe de Egipto


No diré que es amor - Hércules

(Como anillo al dedo XD)

Una vez en diciembre - Anastasia


La corte de los milagros - El jorobado de Notre Dame


(Esta última me encantó cuando la vi en el teatro *-*)

Esto es Halloween - Pesadilla antes de Navidad


Epiphany - Sweeney Todd


Bárbaros - Pocahontas


Canta el ruiseñor - Cenicienta

(Esta se merece estar en el top 10 ya que era una de mi pelis favoritas de peque, y aun me encanta y me descojono con las malditas hermanas XD)

Y por último no podía faltar:

Eres tú - La bella durmiente


"¿No te acuerdas? Fue una vez en un sueño"

Mi vena más ñoña e infantil se ha mostrado en esta entrada, pasad un feliz día. XD

domingo, 17 de julio de 2011

Si no respiro es por no ahogarme...

Intenta no respirar...

Tenía ante sus ojos el coloso de Rodas reconstruido, ligeramente diferente, pero no importaba, vio sus cuencas vacías llenas de orgullo y egoismo, y sintió deseos de derribarlo a puñetazos. Una lágrima descendió por su cara, se dio cuenta que estaba delante de su propio espejo.

Yes

Needles, needles everywhere...

Con las mejillas empapadas, con los sentimientos atrofiados y las esperanzas rotas, esto puede parecer un maldito escrito emo, pero realmente en mis oidos estalla rammstein seguido de extremoduro con toda la furia que es capaz de transmitir con sus grandes "du hast" o "moskau", "so payaso" o "tercer movimiento". Y con esta magnífica banda sonora de fondo me dispongo a hacer un pequeño recuento de todas las cosas que me han ocurrido en los últimos años, lo más resumidamente que pueda, o no, pero en fin, este es mi blog al fin y al cabo y a quien no le guste, que no lea.

Recuerdo los inicios de todas mis correrías, de todas las desdichas que me han proporcionado el maldito pensamiento pesimista que rige la mayoría de cosas que hago, digo o escribo, y todo empezó en el mejor lugar posible, el colegio, aunque con una familia buena, no tenía la mayor importancia. Luego se torció la familia, donde mi madre enfermó, los problemas entre familiares provocaban discusiones tontas que acabaron separando a muchos y alejando a hermanos y primos.

Después, cuando he querido a alguien, da igual de que forma fuera o de como lo intentara, todo acabó fatal con un ostión sentimental o con una roptura difícil que acabó con discusiones y malos rollos por ambas partes. Luego la gente que me ha querido, a amigos; normalmente he acabado fallando y haciendo daño a aquellos que me han protegido y que han estado a mi lado cuando lo necesité, a parejas; lo mismo, he hecho daño o he acabado incumpliendo la maldita palabra del "te quiero". La conclusión es clara, soy una maldita egoista.

Ahora hablando de mí misma, el gran reflejo de voces que suena en mi cabeza como si no hubiera otro lugar al que largarse a tomar un maldito café me produce tal estado de nervios que muchas veces me quedo sin habla y con cara de gilipollas, mirándome al espejo sin reconocer a la que se refleja. Examinando todo mi cuerpo perfectamente entrenado para ser débil y ser cobarde delante de las situaciones que han requerido valor, porque esa es otra:

Volviendo a mi maravillosa teoría (notese la ironía) de que las relaciones son como una partida de poker, pienso, y esto lo digo muy en serio, que nunca he tenido cartas y que cuando por algun casual he tenido algo por lo que apostar, me he acobardado y enviándolo todo al garete. No os engañeis, llevo 3 párrafos hablando de lo mismo, con malditas metáforas o con verdades tajantes, aunque claro, sigo siendo demasiado cobarde como para enfrentarme a todas las cosas que realmente me atormentan o quiero conseguir, pero, como siempre, en el momento en que decida coger las riendas, las cosas saldrán por el camino que nunca esperé "as always".

PD: Siento el uso repetitivo de la palabra "maldito/a" y si alguien lee esto, mis disculpas por desahogarme con vosotros, gracias!

sábado, 16 de julio de 2011

Mama

I know motherfucker, we all go to hell...



Sentía el cuerpo extraño
y las costillas rotas,
tenía en el paladar un sabor raro
y la lengua agria.

Ella se fijaba en mí
y yo rezaba por que no se diese cuenta,
ella subía el volumen
y yo escuchaba sin oír.

Las luces carraspearon
el televisor demasiado alto
hizo que no hubiera discusión.

En un puño el corazón,
las lágrimas sin compasión
mojaron y congelaron cualquier emoción.

Ella sigue luchando, gritando, luchando,
yo sigo escuchando, huyendo, escapando,
bueno he tratado de arreglarlo,
pero ahora más cierto que ninguna discusión,
sé que no hay solución.

Massa fred...

He tingut un mal pressentiment
diguen que soc diferent,
caminant pel vell carrer,
sé que res és el mateix.

A les mans un mapa,
i als sentiments l'estaca
de la teua absència
buscant-te dins els meus records.

No puc amagar-ho
ni intentar oblidar-ho,
es massa pesat per mi.

Les mans calentes
però les emocions fredes
ja no recorden el teu calor.

jueves, 14 de julio de 2011

My little secret...



"¿Cuándo te giraste... quién estaba detrás?"

    A sus amigos les fascinaban los frascos que colgaban de su cuello, rellenos de un líquido extraño que no dejaba indiferente a nadie. Al igual que el llavero que colgaba del bolsillo de su pantalón con una curiosa forma semejante a un ojo de cristal, aunque muy bien conseguido, pues eran de una belleza y de un realismo que daba incluso miedo. A ella le encantaba exhibir tanto su colgante como su última adquisición en cuanto a la colección de ojos de cristal. Muchos de sus amigos le preguntaban de dónde los había sacado, ella solo reía y respondía que eran de una tienda especializada de su pueblo.
    Se despidió de todos y volvió a su casa. Acariciando suavemente el colgante entró en ella y cerró con llave la puerta. Comprobó las ventanas y que no hubiese nada raro allí. Todo normal, su hogar seguía tal y como lo había dejado. En la cocina abrió la nevera y sacó un par de tapers con sobras de la cena de ayer, una rica pizza barbacoa que inundaba todo su paladar. Luego fue a su despacho y revisó los documentos para la reunión de mañana y los guardó en su maletín de trabajo. Sentada en su butaca tomó una última copa de tequila antes de ponerse manos a la obra, lo saboreó exquisitamente dejándose embriagar por el calor que abrasaba su garganta y más tarde su estómago.
    Terminada la bebida, se dirigió a la puerta del sótano y la abrió con una de las llaves que colgaban de su particular llavero. Encendió la luz y cerró la puerta bajando sigilosamente las escaleras. Para su agrado, su nueva víctima seguía allí, quieto, inamovible, no le quedaban más fuerzas para intentar gritar o gimotear. Parecía dormido y le observó admirando su "obra", recordando lo estúpido que había sido dejándose seducir por una chica desconocida tan solo porque le proponía pasar una noche emocionante. “Estúpido”. 
      Sus mejillas estaban manchadas de sangre, sus brazos fuertemente heridos a conciencia dibujando símbolos que ella misma había inventado. Tenía la piel del pecho parcialmente arrancada donde se podía distinguir a la altura del corazón un dibujo del mismo. Además en las piernas desnudas llevaba un cilicio que parecía cortar la sangre de su pierna. Le encantaba la escena y ahora tocaba finalizar el trabajo con un espectacular final. Cogió la daga regalada por su padre y la examinó comprobando que estuviese correctamente afilada, luego le despertó cortando un lado de su mejilla lentamente dejando que se escurriese la sangre por la hoja que sostenía fascinada por el tono oscuro y la espesor casi sólido que derramaba la nueva herida. Él intentó gritar pero ella le cubrió los labios con la daga y le hizo un gesto para que callase. Besó la hoja sin apartarla de su boca, cortándose levemente los labios y sintiendo una sensación de éxtasis indescriptible. Dispuesta a terminar el trabajo, levantó su cabeza dejando ver el hermoso cuello blanco localizando la aorta. Paseó el arma por el cuello antes de que con un movimiento tan magistral como elegante le cortara la yugular.
      Lamió la sangre que aún le caía de sus propios labios y se sentó en una silla frente el muerto, decidiendo cual sería su mejor trofeo. Sus ojos, aunque bellos, eran demasiado comunes con un marrón claro que los teñía con una pupila de lo más corriente. “Demasiado visto”. Cogió uno de los pequeños frascos y lo llenó con la sangre que aún goteaba de su cuello. Lo tapó fuertemente y después de desacordarse el collar y quitarse el antiguo frasco puso el nuevo con suma delicadeza, admirando a cada segundo la nueva sustancia del interior. Volvió a ponerse el collar sintiendo un alivio reconfortante. Luego cogió el antiguo tubo y lo puso en una especie de despensa donde guardaba el resto de su colección. Miró por última vez el atractivo cadáver que aún estando tan pálido como se encontraba, seguía siendo sumamente hermoso. Lo cogió con cuidado y lo arrastró hasta la bañera llena de ácido depositándolo suavemente en el interior. Después se lavó las manos para no correr riesgos en cuanto al ácido y salió del sótano cerrando la puerta con llave. Se dirigió a su habitación y se tumbó en la cama extasiada. El trabajo de esa noche había sido duro, aunque no eran más de las diez. La experiencia había sido muy satisfactoria y a la vez cansada. Contempló una vez más su nuevo trofeo antes de dejarse llevar por los brazos de Morfeo al mundo de sus sueños.

    La tarde siguiente sus amigos y ella quedaron para tomar algo después del trabajo y así planear el fin de semana. Uno de ellos hablaba maravillado por la nueva adquisición que colgaba de su cuello, le preguntó de donde lo había sacado. Ella solo sonrió y contestó:

-De mi antiguo pueblo, ya sabes. Hacen grandes exquisiteces ¿Verdad?

miércoles, 13 de julio de 2011

Mona Lisa...

Mona Lisa...

Otra vez se encontraba gritando
y sus tímpanos pedían clemencia
aunque nadie tenía el control
ella suplicaba que parara

La veía arrodillarse
diciendo que estaba mal
que solo quería volver a la normalidad
aun así siguió rogando por algo en lo que creer...

Ella es como la Mona Lisa
nadie sabe si rie o llora,
la llaman causa perdida
nadie la da más de un par de horas.

Él la abofeteó otra vez
ella lloraba en silencio
la anterior noche muerta de miedo
sabía que no podía salir bien.

Ella suplicaba, y él la ignoraba
mientras repetía que no había solución,
ella no creía que querer de corazón
fuera algo por lo que temer.

Ella es como la Mona Lisa
nadie sabe si rie o llora,
la llaman causa perdida
nadie la da más de un par de horas.

¿Mona Lisa... Hoy dónde te esconderás?
¿Mona Lisa... que harás?

"Toda espera
o cualquier esperanza
por que fuera mejor
rota en mil pedazos,
no quiero compasión
ahora resignada
solo espero lo peor."

Ella es como la Mona Lisa
nadie sabe si rie o llora,
la llaman causa perdida
nadie la da más de un par de horas.

PD: Vale, este muy malo (peor que los anteriores) pero, realmente necesitaba desahogarme. Gracias!

En fiin!!! XDDD

lunes, 11 de julio de 2011

Moon...
















Era una noche como esta,
no había ni una estrella,
todas parecían asustadas
y de ella se ocultaban.

Era como un lucero gigante,
un haz de luz majestuoso
posado sobre sus ojos
que embelesaban y volvían locos.

La luna la mostró a ella,
no digo que fuera perfecta
mas era sumamente bella,
la magia de esa noche hizo que en mí se volviera eterna.

Ahora sin miedo pasea,
y yo la observo detrás de estas rejas
ya que por su culpa hoy en mi corazón cumplo condena
pues fue por ella por quien perdí la cabeza.

domingo, 10 de julio de 2011

La marea me dejó...

...la piel cuarteada, la miel en los labios y las piernas enterradas...

Kuroi namida...

Ellos la miraban fríamente, de una forma que asustaría, sus ojos ya no podían reflejar el cariño fraternal que antes mostraban delante de todos...

Le caían en silencio,
lágrimas de desprecio,
una crueldad que superaba los límites del entender...

Llevaba noches sin conciliar el sueño
mientras las mejillas empapadas,
en su mente se conjuraban horribles promesas...

No había nadie que la escuchara,
ella seguía en la oscuridad
escondida para que no se percataran,
sabía que si la descubrían sería peor.

Tenía el sabor amargo en su paladar,
la culpa cargada en su corazón
en sus ojos la desesperación,
estaba condenada a no ser aceptada,
ya no... demasiado tarde para ello...

sábado, 9 de julio de 2011

30 minutes...


"Recuerdo tus labios,
y esos ojos que al mirar casi hacen daño!"

      Siempre en la misma habitación, el mismo lugar de siempre para componer o escribir cualquier cosa que se le pase por la cabeza. Hoy no hay terceras personas, hoy no hay micro relatos o letras que cuenten una emoción. Hoy solo pide unos minutos para desahogar su sentimiento más interno, que aunque nunca escondido, siempre lo ha negado. Ella, quién duramente la trata con la misma frialdad como si se tratase de cualquiera; ella, quién duramente acomete sin darse cuenta contra su autoestima.
       No deja de pensar y pensar, intentar convencerse a si misma que sería una locura, aunque muy propia de ella, ya que nunca ha sentido ni el mínimo respeto por la "moral" cristiana ni por la opinión contraria de sus padres. Se sentía bloqueada, como si no pudiera avanzar ni retroceder, como si no pudiese recordar ni olvidar. En su alma sentía el peso del amor como la peor de las culpas, y sabía que nunca podría salir bien algo así, por ello se consolaba con fantasear o soñar con su amor secreto sintiéndose avergonzada cada vez que lo hacía.


"30 minutes to whisper your name
30 minutes to shoulder the blame
30 minutes of bliss, 30 lies
30 minutes to finally decide"

Angels call your name...

Plumas en su espalda,
brillo en sus ojos,
sueños de grandeza
a la orden de un vil señor.

Sacrificando su existencia,
les prometen vírgenes eternas
paraísos repletos de nubes,
el Edén de la felicidad.

Agarrados a su efímera esperanza,
rezan por despertar
en el prometido lugar.

jueves, 7 de julio de 2011

¿Qué me dices...

     Había flores en su aposento, en un lugar apartado, lejos de cualquier mirada curiosa que las pudiera marchitar. Todas las noches las cogía con cuidado y las acariciaba suavemente mientras recordaba el aroma que transmitían. Ellas parecían fuertes, sin demasiado orgullo, pero erguidas siempre aunque hubiesen perdido su antiguo olor. Seguían viéndose hermosas y brillantes, pero no daban ninguna fragancia. Sabía que cualquiera que las viera las despreciaría y las tiraría en el suelo. Pero ella las guardaba secretamente como el mejor de los tesoros. Las cuidaba con esmero, con la delicadeza con la que era capaz una madre de arropar a su hija. Pensó en quién le había regalado las flores. Sonrió, antiguamente las hubiese tirado sin ningún tapujo, pero ahora las abrazaba con todo el cariño que no era capaz de expresar hacia esa persona.

...si te traigo esta noche descalza, y te enseño con todos los labios, los matices...?

miércoles, 6 de julio de 2011

WTF?

(No tiene demasiado sentido, pero ahí va)

     Esperó ansiosa en la entrada del restaurante, su cita se retrasaba ya veinte minutos y le molestaba sobre manera que ocurriera éso. Intentó respirar hondo para tranquilizarse, las farolas de esa calle daban un suave tono amarillo a la noche, un color que daba la impresión de estar en una postal antigua. Levantó la cabeza mirando a ambos lados mientras veía salir gente del interior del local. No había ni rastro, ¿Dónde demonios se había metido?. Pensó que tal vez estaría en un atasco, o tal vez había tenido un accidente. Borró ese último pensamiento de su mente, no iba a ponerse en lo peor por treinta minutos de retraso. Echó un vistazo a su móvil, ni una llamada perdida ni ningún mensaje, probó en llamar pero salió el buzón de voz en respuesta. Extrañada, se impacientaba cada segundo que pasaba, miraba constantemente su reloj intentando hacer que el tiempo pasara más despacio en vano.
     Una maldita hora llevaba allí plantada, muchas de las parejas que habían entrado a la misma hora que su cita empezaban a salir del restaurante. Los miraba con rabia y con enfado, muchos de ellos susurraban acerca de ella cuando se alejaban lo suficiente. Aunque la idea del accidente le volvió a la mente con más fuerza que antes. Probó llamando a su casa, pero nadie contestó. La hizo ponerse en lo peor, tenía las manos mojadas y seguramente su camisa manchada del mismo sudor, aunque poco importaba ahora, sacó las llaves de su coche y se subió a él dispuesta a recorrer el teórico camino que hubiese recorrido su acompañante.
      Hizo el trayecto sin ver nada, llegando a su casa nerviosa y apunto de arrancase las yemas de los dedos de la frustración. Llamó al timbre y una voz extraña contestó, sorprendida le preguntó quién era, y este le contestó que el dueño de la casa, Enrique Maroto. Incrédula revisó los nombres de los buzones y para su sorpresa no estaba el que recordaba. Salió fuera tambaleándose de la impresión sentándose en el bordillo de la acera para no caerse. Se quitó las gafas y las limpió concienzudamente como si quitándoles la suciedad pudiese entender la absurda situación. ¿Qué demonios ocurría? ¿Dónde diablos estaba? ¿Sería solo una ilusión suya? ¿O tal vez lo había soñado? Nada tenía respuesta en el momento, y estaba francamente desesperada, se echó a llorar sin saber de que otra manera actuar. Levantó los ojos al cielo viendo la silueta de las pálidas estrellas en el firmamento, diluido en gran mayoría su brillo por la luminosa calle, aunque había una en particular que brillaba de una manera especial. La miró curiosa unos instantes y detrás de su oreja unos labios susurraron “Espero no haberte hecho esperar demasiado”

martes, 5 de julio de 2011

Es un paso más...

"Si busco en los mapas
que nos dieron al llegar
me pierdo en la recta
sin brazar..."

"¿Dónde quedaron las historias de grandes caballeros que salvaban a bellas damas? ¿Dónde fue la guerrera que era dueña de su destino?"

    Se quedó en el rincón pensativa, observando la gente diferente del local que bebía cómodamente sin ningún remordimiento. Repasaba sus ropas formales y sus distinguidos trajes, algunos con corbata, otros con chaqueta y camisa de seda, muchos con el cigarro encendido consumiéndose lentamente en sus vacías bocas. Hablaban de temas diversos, desde política y la situación actual del país hasta los últimos resultados de su equipo favorito de fútbol. Algunos incluso tenían charlas de lo más interesantes sobre temas filosóficos y divagaciones personales que pretendían exponer ante sus compañeros de mesa. Ella sorbió un poco más de su gintónic y pidió a la camarera que le trajera un vaso lleno de tequila. La anterior bebida se le quedaba corta para tranquilizar sus pensamientos. Acostumbrada a la escena, encendió otro cigarrillo contribuyendo a la espesa niebla que se había instalado en el local. La música, a un volumen audible y que no molestaba, daba un ambiente íntimo a los clientes que pretendían tener una velada agradable. Ella en cambio, pretendía olvidar un nombre de su cabeza, un maldito nombre y un maldito rostro grabados a fuego en sus memorias.
    La camarera le dio el tequila y se lo bebió de un solo trago. Ésta la miró extrañada pero se fue sin decir nada. Se acomodó un poco en la incómoda silla y divagaba en momentos, frases o palabras clave para llegar a entender como se encontraba en esa situación. Sus ojos se cerraron al recordar su sonrisa y mordió sus labios al volver a tener en la mente sus piernas. Se sentía sucia cuando fantaseaba de esa forma, pero había acabado por acostumbrarse. Abrió los ojos y los detuvo en un chico que tendría más o menos su edad que no dejaba de mirarla. Sonrió forzosa, sin ganas apenas, pero él lo interpreto como una invitación a que se acercara y se sentara a su lado. Ella volvió la vista al humo que desprendía su cigarro, le dio otra calada y esperó paciente a que el chico se sentara y le formulara cualquier pregunta estúpida para empezar una conversación. En su mente una pregunta no dejaba de retumbar “¿La gente no percibe los sentimientos de los demás?”. Poco importaba ya, el chico había pronunciado la pregunta estúpida y no tenía otra salida. Intentó tomárselo con filosofía, al menos estaría alejada de su recuerdo por unas míseras horas.

Bella

Encontré el color
en una mañana gris,
encontré el olor
en un flor marchita.

Vi un cielo azul
en una paisaje negro,
vi una vida latente
al lado de un ataud.

Descubrí un nuevo lugar
en el antiguo imperio de la soledad,
descubri un nuevo lenguaje
a la luz de viejos escritos.

Busqué la tranquilidad
en una película de terror,
busqué la verdad
en una maldita religión.

Detuve el tiempo
para observar sin intención
las cosas que han ido pasando
y saliendo de mi interior.

Detuve un momento las horas
solo unos segundos,
para contemplar sin apuro
que realmente, eres hermosa.