sábado, 26 de octubre de 2013

Erase scars


Demasiados años, demasiado tiempo...


Ventanas y cristales se ahuman
en una espiral de continuo crescendo,
de pensamientos cada vez más ciegos
al ver que toda posibilidad se nubla.

 Atardece más rápido cada día
oscurece sin compasión
y deja la noche con la pretensión
de dejar atrás la vieja herida.

Encubierta con ceniza
la lleva cada vez más infecta
de todo aquello que aún la intimida.

No cierra, y se desliza
aquella lúgubre venda
con la que trató de curar su locura enfermiza.
 
 
Hasta el fondo, no se detiene esta locura
este círculo de absurdez y de delirio
conducido por el mismo y no recíproco ciclo
que la hace adorar cada palmo de su figura.

sábado, 19 de octubre de 2013

Ícaro (parte 4)


 

-¿Sigues ahí?
-Me temo que sí.- Recogió su bufanda del suelo y se la volvió a colocar alrededor del cuello.- Seguro que así no se vuelve a caer...
-¿Cómo te encuentras?
-¿Te importa?
-Digamos que...- Miró el cielo durante unos instantes y luego soltó una risotada.- Siento curiosidad, querida.
-Entonces te vas a quedar con las ganas.
-Borde.

      Desde hacía días se había pegado a su lado, como antaño, sin dejarla asolas ni un momento. Sus contoneantes movimientos se repartían a cada lugar que fuese y sus labios tenían la extraña predilección de posarse junto a su oreja para susurrarle y, a la par, recordarle todas las cosas que habían sucedido los últimos meses.

-Venga, sabes que tan solo quiero ayudarte.
-¿Ayudarme a enloquecer antes?
-Claro, así seguro que dejas de sufrir.- Volvió a reír mientras golpeaba el hombro de Ícaro con la suficiente fuerza como para balancearla.
-Puedes irte a...
-¿...Tomar viento fresco? Eso es más de tu estilo, cariño.
-¡Demonios! ¡He hecho cuánto me has dicho y gracias a ello he metido la pata prácticamente en todo! ¿¡Qué más quieres!? ¡No puedo hacer más!
-Lo peor es que sigues pensando que soy alguien distinto a ti, y no te das cuenta de que yo, Greta, soy más Ícaro que tú misma. ¡Por favor, abre los malditos ojos! ¡No soy más que una creación tuya!
-Eres el producto de mi propia mente desquiciada...- Dijo esto casi de forma inaudible, bajando la cabeza lentamente y apretando los puños.- Eres lo que cree para tratar de convencerme a mí misma de que había alguna posibilidad de redención para mí y, luego...
-Intenté hacerte ver que era lo mejor.
-Con un éxito pésimo.
-No es mi culpa.
-No, claro...

      Entró dentro de su habitación y cerró la ventanas que daban a aquella especie de balcón; su tejado. Se sentó en su cama y miró de reojo como Greta toqueteaba y observaba objetos al azar. Se dejó caer e inhaló cuanto aire pudo.

-Eres muy estúpida.
-Lo sé.
-Y una idiota.
-También.
-Deja de darme la razón.- Se colocó encima de Ícaro y la obligó a abrir los ojos.- Tienes que reaccionar, dejarte llevar por lo que verdaderamente sientes.
-¡Ya lo hice!- Se levantó de repente e hizo caer a Greta de encima suyo bruscamente.- ¿¡No viste lo que ocurrió!? ¿¡No te diste cuenta de que todo acabó peor de lo que se podía esperar!?
-Au... sí.- Se pasó la mano por su cabeza que había impactado contra la esquina del esccritorio al que había sido lanzada.
-Entonces creo que cualquier discusión que podamos tener sobre esto está de más.

        Greta ladeó la cabeza mientras miraba como poco a poco, como de costumbre, las lágrimas se escurrían por las mejillas de Ícaro.

-No me queda nada que me empuje. Entiéndelo.
-Lo sé. Sé que estás cansada.- Se levantó y empezó a pasear por aquella habitación estrecha.- Tus alas se quemaron al contacto con aquel "sol", y tú te desmoronaste porque no te acordabas de cómo era andar con los pies.
-No...
-Sé que no es lo único, que hay cosas que no puedes ni pronunciar. Pero, aquello te destrozó y te indujo a una especie de shock-paz que está apunto de resquebrajarse. Te tranquilizaste, inexplicablemente, en el momento más crítico, pero ahora tus emociones reclaman lo que les pertenece.- Posó su cabeza al lado de su "creadora" y le susurró.- Quien está enjaulado, tiene ansias de libertad.

    La miró directamente a los ojos, y es que era su propio espejo. Siempre vestía con aquella corbata pegada a una camisa roja y su pelo era siempre corto y despuntado. Los ojos, en cambio, solían diferir bastante de los suyos, marrones rojizos, algo espectacularmente delirante. Acarició su rostro sin esperar un mínimo gesto de cariño, sencillamente quería comprobar los detalles de aquella cara macabra.

-Te estás adueñando de mí.
-Y cada día más. Estás muy débil, mi vida, me han falicitado mucho el camino.
-¿Qué pretendes?
-Nada más que nuestra propia salvación.

jueves, 17 de octubre de 2013

Louder...

Es más fuerte que cualquier palabra que intente pronunciar:




LOUDER, LOUDER THAN WORDS!

miércoles, 16 de octubre de 2013

Fénix.

La verdad, él nunca resurgió de sus cenizas.


Historias que reposan quietas
aferradas a algo sin nombre
hecho de suposiciones "internas".

No le dieron importancia mil hombres
que no encontraron su honra ni su meta
en sus más de mil diferentes voces.

¿A qué, a cuánto se llegó?
Ni mito, ni leyenda alguna
pudieron dar respuesta oportuna
a lo que en verdad no ocurrió.

Y es que se conjuró para destruir su vida
y dar una falsa esperanza a quien creyese
que el milagro de resurgir de la muerte
pudiese hacerse a través de las cenizas.


Ni cenizas, ni tiza, ni intento,
en ese agujero que prende hasta el suelo
de una arrogancia que busca consuelo
en el mismo abismo que cayó su vuelo.

domingo, 13 de octubre de 2013

Una vez más.

A pesar de todo, digo no...



Conjugación de un intento 
escaso, eterno, invisible
tan inmensamente inaudible
que cayó en lo intenso.

Se volvió protocolaria la posibilidad
del intento de algo imposible,
corrompido hasta lo incorrompible,
 algo que no debía llegar.

Desatada, la negación presente
el pesimismo, aún incoherente,
se adueñó de su propio aliento.

No lo aceptó, no pudo hacerlo,
¿A qué se iba a amparar su rima?
¿A quién iba a postrarse su rodilla?

 "A la misma que se la sudaba desde el primer momento"


Una vez más, mi vida, jura,
repite, decide, conjura,
hazlo otra vez, vuelve al final que tu mente
hace renacer de forma absolutamente decadente.
 




lunes, 7 de octubre de 2013

Vestidos

Y ya sé, no puede ser.



Sigue andando a tientas
cada vez más en vano
más lejos del lado
de la cara que muestra.

Alcanza con cada latido
el máximo ritmo inerte
el golpe talmente inconsciente
de un único suspiro.

Sobran palabras y razones
cuando hay tacones
y vestidos que caen por sí solos.

Vale dejarse llevar por los ojos
que obsevan sin ver, miran sin saber
que todo está cada vez más lejos de su entender.



Caen todos los motivos por sus piernas
cuando, sin querer, la siente de nuevo
detrás de su espalda, susurrando el viejo credo
"No hay nadie que te haga sentir como ella"
 

martes, 1 de octubre de 2013

Shingeki no Kyojin - OST #1: Attack on Titan.

Creo que ha nacido la canción para definir cómo me siento, en ciertos momentos, de manera completamente perfecta.


Punto.


No todo es blanco o negro, o gris.




Vuelve noche y día
a aquella que no quiere nada
de quien con suposiciones falsas
adoró cada palmo de su vida.

Sin dejar de pensar y de reír
llega la duda del temor
de no saber definir ese "amor"
tan extraño como infantil.

¿A quién le dijo "quién"?
¿A qué le dijo "por qué?
¿Importa lo que ocurre en ella?

Si de cualquier manera vuelve la grieta
de aquella amarga promesa
que se rompe cada vez que ve a Greta.


El punto que no se rompe
el que crea lo imposible
el que hace que todas las cosas
sin tenerlo, tengan orden.