martes, 31 de enero de 2012

Pienso luego..

...existo.

El mundo en el que vivimos se viene a bajo, iniciando su descenso con una decadencia leve y camuflada hasta llegar a una caída en picado y de una casi segura tranformación a peor de todo cuanto conocemos.
   Reformas en la educación (mientras pagan lo suficiente para hacer callar a la mayoría de institutos y escuelas), en el trabajo (mientras seguimos con más de 5 millones de parados y se sigue pensando que hay que ayudar a la banca privada para reactivar el empleo), más dinero y protagonismo para el sector privado (anunciando que se incentivará la inversión privada en las universidades) y reproches a antiguos gobiernos son los temas más tratados estos últimos días por nuestros señores gobernantes, sin olvidarnos de la absolución de dos políticos que en un principio iban a declararse ellos mismos culpables.
      Si pasamos al plano internacional, encontramos una crisis continua en Grecia (en Atenas los institutos gastan parte de su presupuesto en alimentar a sus alumnos que carecen de recursos), países que quieren retirar petróleo (Irán y su enfado por la prohibición a tocar "juguetes" nucleares) y potencias mundiales intentando no mancharse con todo esto. Una clara muestra de que, no solo en nuestro país, sino en el mundo entero estamos sufriendo, a parte de una crisis económica, una crisis social que abarca desde la cultura hasta la falta de sentido común.
   Y la gran mayoría de nosotros ¿Qué hacemos? Sentarnos delante de nuestros televisores y rezar para que todo esto no nos salpique de ninguna forma (a lo potencias mundiales, intentando mantener el estatus). Mi opinión es bastante simple, y es que no nos damos cuenta de que el cambio tiene que partir de cada uno de nosotros, de cada pequeña mente y de cada persona, desesperada por su situación económica o acaudalada (aunque en este último caso es un tanto difícil) y sobretodo el hecho de que hace falta actuar, ya que, si nosotros no demostramos que realmente tenemos el poder de decidir nuestro destino, ya sea colectivo a nivel de nación o individual, las cosas no van a cambiar.

No hay comentarios:

Publicar un comentario